ICONO DE LOS DRAGONES DEL MANDAR
Volé hacia el espinazo del vampiro
y subí hacia el triunvirato
me posé al límite
latino sulfurar de los ídolos
soy un poeta que cuelga de los cipreses
y ayuna miseria en la tierra baldía
genealogía
del hombre-halcón
hago luz
soy intermitente
pico las venas de la poda de la esperanza
y desde arriba os digo
soy el pájaro de la República de Tanzania
y al soltarme al vacío desciendo
como un asteroide salvaje
y un poeta a los pies de un ciprés
ya sabéis que es una tumba
caparazón electrocutado
espero a una mujer sideral
que baje de otro plano en remolino
en cuatro caballos indios.
Un vendaval de pepitas turquesas
aparecen cuando la veo.
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